Hay que llorar y llorar hasta que faltan las fuerzas, y de repente, te das cuenta, que te encuentras en un pozo hondo, profundo, negro y amargo. Entonces miras hacia arriba y ves un rayo de luz, una esperanza que ayuda a levantarte y seguir adelante a pesar de todo.
Aunque no hayan ganas de correr ni saltar... toca caminar y caminar, y, paso a paso, algún día mirar atrás y ver que el camino recorrido mereció la pena y que ese angosto lugar se quedó a cientos de kilómetros de tí.
Mientras tanto, sigo caminando...
Si estás en esa tesitura que cuentas...ANIMO...yo sí me veo en ella en esta última época e mi vida. Lo has descrito muy bien...yo quiero dejar un poco ese angosto sitio atrás. Besos
ResponderEliminargracias guapa! bueno ultimamente mi vida es como si estuviera subida en una montaña rusa... pero estoy bien ;) a veces solo hace falta desahogarse!
ResponderEliminarUn besito y ánimo tu tb... siempre hay un rayo de luz...
Siempre sale el sol Lucía, pero para para eso ha de caer lluvia torrencial, sino no notarías los rayos...
ResponderEliminarQue foto niña!
La vida puede ser maravillosa Lucia, solo hay que saltar los pequeños o grandes baches del camino.
ResponderEliminarAnimo, un abrazo.
gracias carmen y Josué :)
ResponderEliminarUn besote grande para los dos!